Hay artistas que pueden tallar la madera, existen
otros que moldean el barro o que capturan el momento con un dibujo. El arte es
algo único y especial. En ocasiones no se entiende, pero si llegan a generar
sensaciones indescriptibles en nosotros.
El acero es un elemento duro. Pero, la mano del
hombre ha sabido manipularlo y transformarlo en objetos muy útiles como bases
para sostener puentes, cables para barcos, entre muchas cosas más. Sin embargo,
este elemento combinado con un poco de tecnología, un conjunto de máquinas y mucha
imaginación; puede ser transformado en una obra maestra de arte.
Sin duda alguna, una muestra de escultura de
metal, logra capturar la atención de la gente. No solo por las peculiares
formas que puede tener el diseño, sino por también por las técnicas que se habrán
usado para doblar un material tan fuerte y manipulado como si fuera plastilina.
Si las tallas de madera o las esculturas urbanas te impresionan, el arte de
David Madero, conocido por muchos como el hombre de acero es sencillamente
sublime.
Durante sus años de infancia David creció entre
Estados Unidos y México, siendo este un factor determinante en su obra. Quizás
el eclipse de culturas, visiones, filosofías, ayudaron a expandir su
imaginación. Desde muy pequeño admiró el trabajo de su padre, el arquitecto y
maestro escultor Rogelio Madero, lo que lo llevó a mantener la tradición y continuar
su legado.
David Madero no solo transforma el acero, expande
aún más el concepto de arte; más allá de donde solíamos conocerlo. En las redes
sociales se puede observar los extractos de un trabajo intenso. La decisión de
emprender esta tarea, puede responder a cualquier interrogante de que se puede
plasmar la imaginación en algo único.
Madero tiene la habilidad de convertir piezas
lisas de acero en figuras de muchas texturas y todas transmiten siempre una
sensación de poder. Esto cautiva la determinación y fuerza que un simple hombre
puede sacar de donde menos se lo espera. Simplemente, un arte dramático en
escalas superiores.
Por lo general, la ingeniería artística de este
arte cuenta con criaturas dinámicas, figuras gestuales. Cuenta con la esencia
de lo que es el humano: una lucha constante para trasformar lo que se tiene. En
cada obra hay un elemento de tensión, que puede ser conceptual o gráfico. Pero igual
todas generan inspiración. Porque pulir el material en bruto para llevarlo a
una expresión de belleza artística, reinterpreta las emotivas obras del antiguo
oficio, que se hacía con paciencia y dedicación.
Rogelio Madero en su arte representa la fuerza y
la grandeza del hombre. En una de sus obras se ven dos hombres que muestran
dedicación y determinación, para unir una cadena
de acero negra. Que representa la lucha del hombre para unir y
sellar un pacto de unión, esta obra se llama la fuerza del espíritu.
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